viernes, 14 de septiembre de 2012

Columna de El Titiritero : Selección Chilena : Un Café Amargo



Mala circunstancia para debutar con una columna, mal el tema elegido, mal el partido de Chile contra Colombia, o sea todo mal.

Pero los amantes del futbol tenemos esa virtud, o estupidez si usted quiere, de sobreponernos a las caídas no importando lo duro de ellas; el mandamiento principal del futbolero indica que se debe ser  hincha en las buenas y en las malas. Dicho esto es casi imposible abstraerse al ambiente negativo que ha generado una actuación desastrosa de la selección en su casa, ante su gente y frente a un rival que se comió 10 goles en los últimos 3 partidos que disputó frente a chile.
Entonces que ocurrió el Martes recién pasado? Por qué Colombia nos bailó al ritmo de la mejor cumbia en el Monumental? Como pasamos de ser lideres de las “Clasificatorias” a ser quintos en las “Eliminatorias” rumbo a Brasil 2014? En donde quedó extraviado ese equipo agresivo, de buen toque y una dinámica capaz de arrollar al rival mas poderoso?

Vamos por parte; Colombia realizó el partido opuesto al que nuestro DT (un tipo bonachón al  extremo tal  de dar las tardes libres a sus muchachos, porque “los vió bien”) no se refugió, tomó rápidamente el control del mediocampo y asfixió a una roja nerviosa. De mitad para arriba los morochos son letales, tienen a un tipo que está  encendido como Falcao, que en los últimos partidos lleva mas goles de los que yo hice en mi pobrísima carrera como futbolista amateur, a Teo Gutiérrez, quien de no ser por su extraña afición a las armas y el escandalo ya estaría jugando en cualquier club europeo, un tipo  como Macnelly, desechado por Colo-Colo y luego reemplazado por el “Mágico González” increíble!!! Y a un James Rodríguez en un nivel superlativo manejando el juego a su antojo.

Y Chile: bien gracias! Una defensa improvisada con Vidal fuera del puesto que lo tiene consagrado como uno de los mejores del Calcio, Jarita en lo suyo (casi nada) y Marcos González mirando como se divertían los cafeteros. Isla fuera de ritmo, Mena no fue ni la sombra de lo que juega en la U y una dupla de volantes centrales, Medel y Díaz, que jamás se apodero del medio. Caso aparte el pitbull cayendo por enésima vez en su mal entendida guapeza y matando las pocas chances que teníamos de ganar. Después de su expulsión, Díaz solo corrió para todas partes como perrito nuevo sin aportar nada al equipo. El Mati fue junto a Bravo, lo mejor de lo nuestro, aportando ambos sacrificio y amor propio en un equipo sin alma. Me pregunto todavía si el Sánchez que ví era el del Barca o el doble que salió en todos los diarios, un verdadero triatleta; correr, bicicleta y nada.
Lo de Chupete es tremendo. Un tipo que hace 2 años fue goleador de las eliminatorias, temible delantero para nuestros rivales, hoy juega a 40 metros del arco y sin un solo pase que lo deje a mano a mano y en una soledad increíble.

Que hacemos entonces? La respuesta solo la tiene el Bichi, queda un mes para enfrentar al difícil Ecuador en la altura de Quito y luego recibir a la Argentina de Messi, Higuaín y compañía.

Solo puedo indicar desde mi humilde tribuna que es imposible a los muchachos se les olvide
jugar al futbol de un partido a otro, es imposible que a Borghi se le olvide dirigir si no hace mucho fue multi -campeón en Chile y llevó a Argentinos Juniors a ganar el torneo Argentino (equivalente a ser campeón en Chile con el Chaguito Morning) por lo tanto debe dejar de lado las criticas, enfocarse en levantar a sus hombres y seguir peleando una guerra que no esta para nada perdida, revisando una y mil veces los errores cometidos y planificando los próximos 6 puntos que serán vitales en la carrera rumbo a Brasil.
Como buen hincha, estoy dolido, enojado y triste, pero aún creo en mi roja, no importa las veces que caiga, siempre estaremos ahí como lo dicta el primer mandamiento del hincha futbolero

Amén!

El titiritero

Casi promesa del fútbol

ex-talento creativo

actual defensa hachero

En Twitter : @DonTitiritero



CRÁCK´S : El Último 10 Clásico : Juan Román Riquelme


Un Ídolo para su club boca juniors, donde lleno de magia cada cancha que piso y que ilusionaba en cada toque que daba al balón. 
Un señor del fútbol, que priorizo siempre el buen juego. ese es nuestro Cráck de hoy y así lo describen estas líneas:

Juan Román Riquelme la vida no alcanza, 
Para ver tú arte que no acaba nunca, 
Para verte serio sin saber que pasa, 
Cuando la derrota estar con vos busca. 

Juan Román Riquelme dios de los bosteros, 
Dios de un solo templo, de una sola biblia, 
Dios de los xeneises, dios de todo el pueblo, 
El futbol sin vos, futbol no sería. 

Juan Román Riquelme, esta es su Historia


En 1978, un día antes de la primera conquista argentina en una Copa del Mundo, nació en Buenos Aires Juan Román Riquelme. En efecto, el 24 de junio de aquel año, el hogar de la humilde familia Riquelmerecibió a uno de los once hermanos.
El romance entre Román y la pelota no tardó en concretarse. Desde muy pequeño, Román se destacó en los potreros de su San Fernando natal. Primero defendió los colores de clubes barriales, entre ellos La Carpita. El gran nivel de Román en aquellos campeonatos barriales llegó a oídos de varios buscadores de talentos, quienes debieron luchar para convencer a Román de fichar por algún club grande. El enviado de Argentinos Juniors convenció a Román y se lo llevó a La Paternal.
Los primeros tiempos en la disciplina de Argentinos Juniors fueron duros, Román tuvo problemas para conseguir la titularidad y ocupó en principio, el puesto de mediocampista central. Desde allí, desplegó todo su talento, pero esa función obligó a Riquelme a realizar un gran desgaste físico, lo que le costó perder la titularidad.
Mientras tanto, Román forjó su amor por Boca Juniors cada domingo desde las tribunas de “La Bombonera”; el padre de Emmanuel Ruiz, otro crack “made in Argentinos”, llevó a ambos amigos con rigurosa disciplina a ver al primer equipo “azul y oro”.
El gran juego de Román lo hizo famoso en el ambiente de las divisiones inferiores. En 1996, Carlos Bilardo aconsejó a Mauricio Macri la compra de varios valores de Argentinos Juniors. En una operación sin precedentes en el fútbol argentino, Boca adquirió al club de La Paternal las fichas de grandes promesas: Fabricio Coloccini (hoy flamante figura del Atlético Madrid), Pablo Islas, César La Paglia, Carlos Marinelli (titular en el Middlesbrough inglés), Emmanuel Ruiz y Juan Román Riquelme.
Obviamente, Riquelme causó sensación en Boca desde el principio. La pobre campaña del conjunto “xeneize” obligó al entrenador Bilardo a apurar el debut del talentoso mediocampista del barrio San Jorge.
Román debutó el 11 de noviembre de 1996 ante Unión de Santa Fé en “La Bombonera”. Aquella tarde Boca venció 2 a 0 al conjunto “albirrojo” en lo que fue el comienzo del romance entre Riquelme y la parroquia boquense. De allí y hasta el final del torneo Apertura, Riquelme fue titular y su nivel fue en ascenso.
Su primer gol en primera no tardó en llegar. El 24 de noviembre Riquelmeconvirtió el sexto gol en la goleada de Boca sobre Huracán por 6 a 0; Román volvió a marcar en la derrota de Boca 4 a 2 frente a Rosario Central.
En febrero de 1997, Román formó una gran dupla creativa con Pablo Aimar en la selección sub 20 que ganó en forma brillante el Campeonato Sudamericano de Chile, en aquel torneo convirtió 3 goles.
Héctor “Bambino” Veira asumió la dirección técnica de Boca Juniors a principios de 1997. El juego del conjunto en general nunca fue bueno en el torneo Clausura, pero Riquelme consiguió mantener su nivel a lo largo de los 14 partidos que disputó y en los que marcó 2 goles.
José Pekerman construyó un verdadero “Dream Team” para el Campeonato Mundial de Malasia: Riquelme, Aimar, Samuel, Placente, Scaloni, Cambiasso, Romeo y Franco entre otros brillaron en la espectacular conquista argentina. Riquelme convirtió 4 goles en el campeonato.
El talento de Riquelme hizo que equipos de Europa como el Betis de Sevilla y el Parma se interesaran en su concurso. Román desestimó ambas ofertas y prefirió continuar jugando en el club de sus amores.
Veira acarició la gloria con Boca en el Apertura ’97, pero al equipo le faltó gas en la parte final y el campeonato fue a las vitrinas de River Plate. Pero en la vida futbolística de Román hubo un hecho testimonial: el 25 de octubre se enfrentaron River y Boca en el “Monumental”. Ese encuentro fue el último que disputó oficialmente Diego Armando Maradona; tras una derrota parcial por 1 a 0, Veira dispuso el cambio de Riquelme por Diego Maradona y Boca pudo dar vuelta el juego y el resultado de la mano de Román. Ese cambio fue el traspaso del trono de Diego a Román. Aquella gloriosa tarde, Román fue considerado unánimemente la figura del cotejo por toda la prensa especializada.
El 16 de noviembre de 1997 Román debutó en la Selección Mayor. Y el debut no pudo ser en otro lugar que “La Bombonera”. Daniel Passarella convocó a Riquelme al último partido de Argentina en las eliminatorias hacia la Copa del Mundo Francia ’98. Riquelme ingresó en el minuto 80 en lugar de Marcelo Gallardo y las tribunas estallaron con una cerrada ovación.
El primer semestre de 1998 fue muy difícil para Boca Juniors. El equipo de Héctor Veira se bajó temprano de la lucha por el título y Riquelme jugó poco en ese torneo. No obstante esto, Riquelme fue nuevamente convocado por José Pekerman para el Torneo Esperanzas de Toulon. Argentina se alzó con el título y Juan Román Riquelme fue considerado el mejor jugador del torneo.
Pero en julio de 1998 llegó a Boca Juniors el entrenador Carlos Bianchi. Este extraordinario director técnico respaldó a Riquelme desde el primer día; lo hizo sentir importante y le dio un rol protagónico. Y Román no defraudó a Bianchi: el condujo magistralmente al Boca campeón invicto del Apertura ’98. Riquelme tuvo asistencia perfecta en el torneo y marcó 3 goles. Riquelme conformó un letal trío ofensivo junto a los delanteros Guillermo Barros Schelotto y Martín Palermo.
El gran paso de Boca continuó con la obtención del Clausura ’99.Riquelme continuó deleitando a todo el mundo del fútbol con su excepcional juego repleto de belleza y efectividad.
En julio de 1999 Riquelme fue convocado por el seleccionador Marcelo Bielsa; Román formó parte del plantel que disputó la Copa América Paraguay ’99. El nivel que mostró el talentoso mediocampista fue bueno, pero sin llegar a los niveles de Boca Juniors.
En agosto de 1999, Riquelme y el Barcelona se vieron las caras por primera vez. Una verdadera exhibición de gambetas, pisadas y caños de un inspirado Román enloquecieron a los defensores “blaugranas” durante un amistoso disputado en Málaga en el que Boca venció por 3 a 2.
En el año 2000 llegó el momento de afrontar el gran desafío: disputar la Copa Libertadores de América. Y Román fue gran artífice de la tercera conquista continental de Boca Juniors. En la memoria de la afición boquense perduran grandes momentos de Riquelme como el golazo de tiro libre a River en el Monumental, el penal convertido y el caño de taco al defensor Yepes en la revancha ante el mismo rival y el fútbol desplegado durante las finales frente al Palmeiras.
Con América a sus pies, Boca fue por el Mundo... El equipo de Carlos Bianchi encaró la segunda parte del año 2000 con el objetivo prioritario de la Copa Intercontinental y con la intención de pelear hasta el final el Torneo Apertura y la Copa Mercosur. Y Boca estuvo cerca del póker... Boca ganó el campeonato local, llegó a octavos de final en la Mercosur y tocó el cielo futbolístico a fines de noviembre en Tokio cuando batió 2 a 1 al Real Madrid. Aquella noche Riquelme deslumbró al mundo con una actuación sensacional. Román se convirtió en una pesadilla para toda la defensa madridista, en especial para Geremy y Makelele. Tan espectacular labor de Román hizo que el Barcelona se convenciera de su fichaje. El conjunto “culé” acordó el traspaso con Boca Juniors en una suma superior a los 20 millones de dólares, operación que luego quedó frustrada.
El 2001 trajo como gran desafío revalidar todos los títulos obtenidos durante el 2000. Boca Juniors no pudo repetir el juego brillante de la temporada anterior pero el oficio del equipo le alcanzó para retener la Copa Libertadores. En el torneo local, lo más destacado fue la paliza 3 a 0 a River en “La Bombonera”. Aquella noche Román mostró por primera vez su festejo a lo “Topo Gigio” (en honor a su hijita Florencia, según dijo).
El equipo debió recorrer un durísimo camino hacia la Copa. En el infierno del Estadio Metropolitano de Barranquilla Boca sacó a relucir su temple y venció al local por 3 a 2; en la revancha igualaron 1 a 1.
En cuartos de final, el rival fue el Vasco Da Gama, equipo que hasta el momento de enfrentar a Boca había ganado todos sus partidos. El campeón de América venció al Vasco 1 a 0 en Río de Janeiro y bailó a los brasileños 3 a 0 en una “Bombonera” repleta.
En las semifinales, Boca enfrentó a un Palmeiras dirigido por Luiz Felipe Scolari sediento de revancha. Como en las finales de la Copa del 2000, fue igualdad 2 a 2 en la ida en Buenos Aires (el segundo gol de Boca fue una espectacular apilada de Román para servirle el gol a Barijho) y se repitió el marcador en el Parque Antártica, el hogar del “verdao”. Pero en la revancha Riquelme jugó uno de los mejores partidos de su vida. El fue el responsable de la clasificación de Boca para la final. Riquelme enloqueció a los defensores de Palmeiras con su repertorio más bello y efectivo, el segundo gol de Boca fue una verdadera obra de arte de Román.
Boca y el Cruz Azul mexicano dirimieron la monarca americano del 2001. Boca sorprendió a los “aztecas” en la primera final cuando venció 1 a 0 con gol de Marcelo Delgado. Todos dieron entonces por descontado el tetra campeonato de América para los “xeneizes”, pero el Cruz Azul le devolvió la gentileza a los dirigidos por Carlos Bianchi y fue necesaria la definición con disparos desde el punto penal para consagrar al campeón. Román tranquilizó a toda la parroquia “azul y oro” al convertir la primera ejecución; las manos de Oscar Córdoba hicieron el resto y Boca retuvo el cetro máximo a nivel clubes en Sudamérica.
El Bayern Munich asomó entonces como el gran desafío para los hombres de Bianchi. Lamentablemente, Boca Juniors cayó derrotado por los alemanes 1 a 0 en los últimos minutos del tiempo suplementario. Román no pudo reeditar su hazaña del año anterior. Los alemanes, debidamente notificados del talento de Riquelme, lo marcaron de cerca y no dudaron en utilizar el juego brusco para detenerlo.
La prensa argentina lo distinguió con el premio “Olimpia” de Plata 2001.
Envuelto en una serie de interminables disputas con la dirigencia boquense, Riquelme supo que estos primeros meses del 2002 serían los últimos con la camiseta “azul y oro”. Riquelme se impuso como gran meta para este año formar parte del plantel argentino del Mundial de Corea y Japón y conquistar por tercera vez consecutiva la Copa Libertadores con Boca Juniors. Lamentablemente, Román no consiguió ninguna de las dos cosas y sufrió además un penoso incidente familiar, lo cual motivó su decisión de abandonar la disciplina de Boca Juniors. Las controversias en las que se vio envuelto le quitaron a Riquelme esa alegría necesaria para desarrollar cualquier actividad.
Tras su discreto paso por el Barcelona, ha logrado demostrar al mundo entero sus cualidades en el Villarreal. El equipo del chileno Pellegrini, semifinalista de la Champions League 2005-2006, ha formado un esquema de juego que depende de Riquelme. Pero tras esa exitosa temporada, y diversas diferencias con el entrenador chileno, Riquelme vuelve a Boca Juniors para ganar su tercera Copa Libertadores.
El día 13 de septiembre del año 2006, Riquelme anunció su renuncia a la selección nacional de fútbol argentina, debido a la complicada situación de salud de su madre. Pero decide volver en 2007, y Alfio Basile le da la capitanía, a pesar de no jugar en su club. Se consagró campeón en los Juegos Olímpicos de 2008. Tambien fue figura en la mayoría de los partidos de las Eliminatorias 2010, y además el goleador del equipo, pero por culpa de Maradona, nuevamente el torero debe renunciar al seleccionado, y de ésta manera se pierde el Mundial de Sudáfrica 2010. 

En la ida de la final de la copa libertadores 2012, Boca empató con el Corinthians 1 a 1 con gol de Facundo Roncaglia y Romarinho. En el cotejo vuelta, Boca perdió 2-0 con goles de Emerson, perdiendo su cuarta final de Libertadores.
Luego del partido, Riquelme anunció que no continuará en el club. Siendo uno de los máximos ídolos de la historia del club, su salida definitiva marca el fin de un ciclo para Boca. De todas formas Juan Carlos Crespi, vicepresidente, aclaró que seguramente Juan Román Riquelme volvería a Boca. 




viernes, 24 de agosto de 2012

CRÁCK´S : Toda la elegancia de un Kaiser : Franz Anton Beckenbauer

Una elegancia ejemplar, una fuerza única. claras características de un emperador del campo. a pesar que sus comienzos en el fútbol fuerón de centro-delantero en el TSV Münich 1860.
Siendo niño jugaba en la calle junto a sus amigos y ya soñaba con ser un gran futbolista. su temperamento y carácter lo llevarón a conseguir la capitanía de la selección alemana y aún más, este en la copa del mundo 1974 se transformo en un referente y quien toma las decisiones dentro y fuera del campo.
Consiguió logros en todos los equipos donde jugó, siendo figura en cada campeonato o liga que obtuvo.
Fue el creador del puesto de líbero dada sus condiciones naturales, para él era muy sencillo llevar a cabo esta posición en la defensa ya que se tiene toda panorámica del juego.
todos alababan el juego lleno de clase y elegancia que desplegaba. Fue la mezcla perfecta a su carisma y potencia que lo llevó a la cima del fútbol mundial.

Sin más que decir de este Gigante, solo basta admirar su juego.

Un verdadero CRÁCK mundial y esta es su historia:

(Munich, 1945) Futbolista alemán. Particularmente dotado como defensa libre y organizador del juego, obtuvo con su equipo, el Bayern de Munich, tres títulos europeos consecutivos, y la selección nacional de la RFA que él capitaneaba se proclamó ganadora de los Mundiales de 1974 (título que posteriormente revalidó como entrenador). Canalizador del juego de su equipo en la posición de líbero, también lo fue de incontables títulos nacionales e internacionales. Fue premiado con el Balón de Oro en 1972 y 1976. Apodado el Kaiser, se retiró de la competición en 1980 tras recibir una gravísima patada en los riñones. Su carrera deportiva continuó como directivo y entrenador.

Franz Beckenbauer
Franz Beckenbauer comenzó a jugar al fútbol en 1955 y ya en 1958, con sólo trece años de edad, pasó al equipo juvenil del Bayern, en cuya primera plantilla debutó en junio de 1964. Con el Bayern consiguió la victoria en cuatro campeonatos de la Liga (1969, 1972, 1973 y 1974) y en otras tantas Copas alemanas (1966, 1967, 1969 y 1971), y cosechó títulos europeos y mundiales: tres Copas de Europa consecutivas (1974, 1975 y 1976), la Recopa de 1967 y la Intercontinental de 1976. Durante su carrera fue proclamado en cuatro ocasiones mejor jugador alemán (1966, 1968, 1974 y 1976), y la revista France Football le concedió su premio al mejor jugador del continente (Balón de Oro) en los años 1972 y 1976.
El Kaiser, como se le conoce en el mundo del fútbol, fue también una pieza fundamental de la selección alemana. Debutó en 1965 con la selección B frente a Holanda y, ya en septiembre de ese año, con el primer equipo alemán frente a Suecia. Su consagración internacional llegó con el Mundial de Inglaterra '66, en el que los alemanes se proclamaron subcampeones. En su segundo Mundial, en México '70, disputó cinco partidos; Beckenbauer fue baja en el partido por el tercer puesto, pero igualmente la selección alemana venció los uruguayos por la mínima (1-0).
Desde 1971 Beckenbauer fue el capitán de la selección en sustitución de Wolfgang Overath, y poco después se inició el dominio alemán en la Eurocopa de Naciones. La selección consiguió la victoria en la de Bélgica '72, tras derrotar a los soviéticos en la final por 3-0, éxito que tuvo su continuidad con la consecución el 7 de julio de 1974 del entorchado mundial en Múnich al derrotar a los holandeses (2-1). En ese potente equipo se encontraban también Netzer, Muller, Breitner, Maier o Hoeness. En la Eurocopa de Naciones de 1976 la selección alemana llegó a la final, pero perdió ante los chechos en los penaltis. En febrero de 1977 jugó su último partido con la selección alemana frente a Francia, cerrando una trayectoria durante la que había vestido 103 veces la camiseta nacional y marcado 14 tantos.
En 1977, cuando Warner Communications y otras empresas invirtieron millones en un intento de crear la Liga de fútbol norteamericana (NASL), Beckenbauer fue fichado por el Cosmos norteamericano por 2.800.000 dólares. En su primer año en el equipo neoyorkino coincidió con Pelé y Giorgio Chinaglia, y fue proclamado mejor jugador de la Liga. En esta primera etapa norteamericana se proclamó campeón de la competición nacional (Soccer Wowl) en 1977, 1978 y 1980. En 1980 retornó a la competición alemana para jugar en el Hamburgo dos temporadas, pero en marzo de 1982 optó por su retirada en Europa, tributándosele un homenaje el 1 de junio entre su equipo y la selección nacional. A continuación, en 1983, volvió al fútbol norteamericano.
En 1984 se hizo cargo como entrenador de la selección nacional alemana. Su primer reto fue el Mundial de México 1986, en el que Alemania disputó la final contra la selección de Argentina, a la que no logró vencer. En el Mundial de Italia 1990, nuevamente Alemania llegó a la final contra Argentina, alzándose esta vez con el título mundial sin perder ningún partido. Beckenbauer se convirtió así en el primer futbolista que ganaba un Mundial como jugador y entrenador.
Después de rumorearse su posible incorporación al banquillo norteamericano de cara a los Mundiales de 1994, en el que eran los anfitriones, el 6 de septiembre de 1990 fichó por el Olympique de Marsella, de Bernard Tapie, propietario de Adidas, marca con la que ese verano había suscrito un contrato por diez años. Dirigió el equipo durante cinco meses, hasta que a finales de diciembre de 1990 fue sustituido por el belga Raymond Goethals. Beckenbauer permaneció en el Olympique de Marsella como director técnico hasta finalizar la temporada 90-91.
Al igual que su compañero Karl-Heinz Rummenigge, en octubre de 1991 aceptó regresar a la entidad alemana a la que había dedicado gran parte de su carrera, primero como consejero del Bayern y desde noviembre como vicepresidente de la entidad bávara. Ante una importante crisis deportiva en su club, el 27 de diciembre de 1993 se hizo cargo del banquillo de forma temporal hasta junio siguiente. El equipo remontó posiciones y acabó ganando la Bundesliga 93-94. Como candidato único a presidir el Bayern, el 14 de noviembre de 1994 la asamblea lo eligió para el puesto para un mandato de tres años. De nuevo, el 29 de abril de 1996 volvió a sentarse en el banquillo del Bayern hasta finales de la temporada, meses en los que el equipo ganó la Copa de la UEFA. En noviembre de 1997 renovó mandato al frente del Bayern, en el que continuó como vicepresidente Rummenigge.

Desde mediados de 1999 apoyó la candidatura de Alemania para organizar el Mundial de 2006, que resultó vencedora, y ocupó entonces la presidencia del Comité Organizador del Mundial. En abril de 2003, después convertir al club en sociedad de acciones, cedió la presidencia de la directiva a Rummenigge, mientras él mantuvo la presidencia del club, un cargo más representativo. En noviembre de ese año aceptó seguir un nuevo mandato en la presidencia del equipo bávaro, aunque gran parte de su tiempo lo dedicaba a la organización del Mundial.
Como máximo responsable del Bayern, el equipo ha conseguido seis títulos de Liga (96-97, 98-99, 99-2000, 00-01, 02-03 y 04-05), así como la Liga de Campeones 2000-01, en la que había sido finalista en 98-99, y la Copa de la UEFA '96. En diciembre de 1993 fue elegido mejor entrenador y segundo mejor futbolista en la historia de la Copa del Mundo, en una votación en la que participaron más de mil periodistas deportivos. La Federación Internacional de Historia y Estadísticas del Fútbol le eligió en noviembre de 1998 mejor futbolista alemán del siglo, en enero de 1999 segundo mejor jugador europeo del siglo XX (por detrás de Cruyff), y en enero de 2000 le situó en tercer lugar de la lista de los mejores futbolistas del siglo XX, sólo superado por Pelé y Cruyff. 


viernes, 17 de agosto de 2012

CRÁCK´S : Matador : José Marcelo Salas Melinao

Un verdadero guerrero araucano. nos represento en cada cancha que tuvo el placer de verle jugar, con gallardía y entereza. un jugador de clase mundial nacido al sur del mundo.
desde pequeño su vida giro entorno a un balón de fútbol. con un pequeño paso por Green Cross, un poco frustrado debido a que su edad era menor a la de sus compañeros y por esto no tenía opciones claras de participar en el equipo.
Por esto su padre lo toma y lo lleva a su equipo de barrio allá en Temuco, el FC Santos, en el cual entra como medio campista a la serie peneca en el año 83.
No hay lugar del mundo no relacionaban a marcelo salas con Chile, el festejo tan especial de sus goles con una rodilla al suelo y su dedo apuntando al cielo dierón la vuelta al mundo después de su brillante paso por el mundial de Francia 1998 donde convirtiera 4 goles.
en inglaterra también sufrierón el paso de este goleador de fuste donde convirtió, en un recién inaugurado estadio de wembley una obra perfecta. un gol que hasta el día de hoy es exhibido en el museo de ese estadio.
Siempre quizo y amo este deporte, un guerrero de sangre araucana de sangre caliente pero de mente fría, un niño detrás de un sueño que se convirtió en realidad un día de enero en el primer equipo de universidad de chile.
Su hermana Claudia describe como es este matador : 

                                                  "La verdad esta en el apellido Melinao.
Es la familia de nuestra madre.
Es un apellido mapuche y toda nuestra familia
tiene la fuerza de la sangre araucana. Marcelo es el primero".
"La sangre india en nuestras venas nos dio una fuerza
descomunal en las piernas. Saltábamos, corríamos... y luego,
cuando el entrenaba, como un superhombre, parecía no
cansarse ".
"Nos enseñaron que debíamos defendernos para vivir.
Pertenecemos a la estirpe araucana, nunca vencida en
trescientos años de guerra con los españoles.
Una guerra que causó muertes y privaciones.
Pero el espíritu de nuestro pueblo permaneció intacto,
lo mismo que nuestra dignidad ".
"En Temuco, desde la mañana hasta la noche,
Marcelo organizaba partidos con sus amigos.
El fútbol era todo y él lo tomaba como una forma de combate,
se arrodillaba como un guerrero indio después de un duelo "

Así es este hombre lleno de fuerza, nos dio tantas alegrías cada vez que inflo una red, gracias a su zurda mágica. nos enseño la perseverancia, después de ese fatídico partido donde sale con su rodilla echa añicos luego de tan largo esfuerzo para estar en élite del fútbol mundial. Vuelve a su River querido , donde le otorgan el honor de vestir con orgullo la jineta de capitán y logrando nuevamente un título más en agradecimiento a todo el cariño de la gente tras su paso lleno de gloria antes de partir al fútbol europeo. 

José Marcelo Salas Melinao, espero poder encontrarnos en el camino y poder entregar un abrazo meritorio y lleno de agradecimiento por todas las alegrías, por cada vez que nos emocionarnos cuando con la bandera chilena celebraras cada triunfo propio, sabiendo que eras nuestro representante.
Ese gran guerrero araucano que salió de Temuco un día soñando y sin saber que sería el gran referente de todo un país. Sin Saber que Sería un Matador 

Esta es su historia : 



  • Nombre: Jose Marcelo Salas Melinao

  • Puesto: Delantero

  • Edad: 24/12/1974

  • Estado Civil: Casado.

  • Años en Universidad de Chile: '93,'94,'95 y de '05 a '07

  • Títulos: '94,'95

  • Apodo: El "Matador"

  • Debut Titular: Debut 04/01/1994 Cobreloa 2-U.de Chile 1.

  • Debut Goleador: 04/01/1994 Cobreloa 2 - U. de Chile 1.

José Marcelo Salas Melinao nació en Temuco, Chile el 24 de diciembre de 1974. Vive toda su niñez y parte de su adolescencia en la ciudad de Temuco, con su madre Alicia Melinao, su padre Rosember Salas, su hermana Claudia y su abuelita María. De su madre hereda la sangre y el temple Mapuche y de su padre el gusto por el fútbol. Comenzó su vida futbolística en su ciudad natal, Temuco, su padre lo inscribió en la escuela de fútbol "Green Cross" que hoy es Deportes Temuco pero no duró mucho allí, pues su edad era demasiado menor a la del resto de sus compañeros de equipo, por lo que casi nunca jugaba. Por esa razón su padre lo lleva a su club de barrio, el FC Santos.

En 1983 entra a la serie "Penecas" del Santos, en la posición de mediocampista y con la camiseta número 10, juega el torneo de la Asociación Regional de Fútbol de Temuco. En 1991 viaja a la capital, Santiago de Chile, a probarse en las divisiones inferiores del Universidad de Chile donde despues de 10 minutos de juego con el equipo suplente, quedó seleccionado y comensaron los llamados a Temuco para pedir su pase.

Fue traspasado a la Universidad de Chile por la módica suma de $66.800 pesos chilenos y sólo una semana después pasó a formar parte de la Selección chilena sub-17, dirigida por el técnico Leonardo Véliz. Su estreno por la selección sub-17 fue en el Sudamericano de Paraguay, donde por primera vez una selección infantil chilena pasa a segunda ronda, terminando en el cuarto lugar, y es nombrado por los entrenadores como uno de los mejores jugadores del torneo. La misma sub-17 luego es invitada a un torneo amistoso en Venezuela, en el cual Chile pierde la final con Ecuador, pero el joven Marcelo Salas es el goleador del torneo. En 1994 viaja a España con la seleción chilena sub-20, a un prestigioso torneo juvenil, que se realiza en la Alcudia, en donde Chile se enfrenta a selecciones europeas,y para sorpresa de todos terminado en segundo lugar, dejando en el camio al local España, y a la poderosa Italia, y sólo perdiendo en la final contra Italia. Nuevamente Salas es figura y goleador de este campeonato. 


Nace el Matador Azul 

El 2 de enero de 1993 debuta en el primer equipo de la escuadra laica estrenándose con un gol ante Cobreloa en la desértica ciudad de Calama. Y tan solo un año más tarde sería su despegue, siendo el goleador de la Copa Chile 1994 con 12 goles en 15 partidos.

En Abril de 1994, dirigido por Jorge Socias, se convierte en ídolo de la hinchada azul, luego de que en el Superclásico del Fútbol Chileno anotase 3 goles a Colo Colo y le hicieran el penal del cuarto gol, con los que la Universidad de Chile humilló 4x0 a su archirrival, en el Estadio Nacional. 


Bicampeón 

Corría el año 1994, luego de 25 años del último campeonato azul, Universidad de Chile logra arrebatarle el título a la Universidad Católica; el partido definitorio, a unas cuantas fechas del final, entre ambas escuadras universitarias fue ganado por la "U" tras el único tanto de Marcelo Salas, gracias a esa ventaja se corona campeón por primera vez, en el empate de visita frente a Cobresal en 1994, campeonato en el que anota 27 goles en 26 partidos, y se consagra como figura del equipo. Repite el campeonato en 1995 anotando la suma de 17 goles en 27 partidos, es bicampeón con Universidad de Chile, equipo en donde compartió con jugadores como Sergio Vargas , Luis Musrri, Leonardo Rodríguez, y forma una temida dupla en la delantera con Rodrigo Goldberg. En este club fue donde se ganó el apodo de «El Matador», por su sangre fría a la hora de definir, inspirado también por la popular canción "Matador" del grupo argentino Los Fabulosos Cadillacs. 


De Chile al extranjero 

Con su buen desempeño en el primer equipo de la "U", debuta en la Selección Chilena el 18 de mayo de 1994 anotando inmediatamente un gol en contra del seleccionado argentino que, capitaneados por Diego Maradona, se preparaba para competir en el Mundial Estados Unidos 1994. Por la "U" participa en la Copa Libertadores de América de 1995, donde juega 6 partidos y anota 5 goles.

Ya era un ídolo en Chile y los clubes extranjeros empezaron a fijar la mirada en el "Matador". Mexicanos, españoles, y más tarde los argentinos no dejaron de gritar las ofertas para tener a Marcelo entre sus filas. Primero fue el club Boca Juniors, específicamente su presidente Mauricio Macri quien quizó contratar al atacante, pero el entrenador Carlos Salvador Bilardo lo desecha por ser chileno, y le dice a los dirigentes que Salas no es una inversión para el club.

Jugó en Universidad de Chile hasta mediados de 1996, destacando en Copa Libertadores de América donde anota 5 goles en 12 encuentros. El club chileno llegó hasta la semifinal, siendo eliminado por River Plate, que a la postre se convertiría en el Campeón del torneo continental. En ese mismo año, su contrato fue adquirido por el empresario argentino Gustavo Mascardi, para más tarde vender su pase en 2.5 millones de dólares al club argentino River Plate. 


Con la banda sangre en el corazón 

Su debut en las canchas trasandinas, fue el 15 de septiembre de 1996, jugando unos minutos frente a Huracán, luego vino el gran clásico del fútbol argentino frente a Boca Juniors, un partido especial para Salas, por su frustrado paso al club xeneise, y además partía como titular en River, y no defraudó, anotó un golazo ganándose el inmediato aprecio de la hinchada.

El técnico de River Plate en esa epoca era Ramón Díaz, y en el equipo destacan jugadores de la talla de Enzo Francescoli, Ariel Ortega, Marcelo Gallardo y Juan Pablo Sorín. Salas anota 7 goles en 14 partidos jugados en el apertura 1996, una muy buena marca para un jugador reserva y en su primera temporada. Los goles más importantes fueron en el partido definitorio contra Velez Sarfield y Salas convirtió los 2 goles, que le dieron el título a River y al chileno la estampa de ídolo en Argentina.

La prensa de ese país le dedica portadas y artículos que no dejan de elogiarlo, pese a jugar como suplente su promedio de goles fue superior al de sus compañeros, y la hinchada riverplatense le demuestra su cariño mediante el canto a todo pulmón de "Chilenoo... Chilenoo".

El, agradece con goles y con su clásica celebración, se hinca, apoyando su rodilla derecha en el césped y con el índice apuntando al cielo.

El año 1997 fue simplemente extraordinario para Marcelo Salas. Se consagra como ídolo en River Plate siendo fundamental en el equipo que consigue el Apertura 97, el Clausura 97 y la Supercopa sudamericana de 1997. Además, con la Selección Chilena logra clasificar al Mundial de Francia 1998. Este mismo año fue elegido el Mejor Jugador Extranjero en Argentina y recibió el premio Balón de Oro del Mejor Jugador de América. 


Juventus, la lesión y el regreso a Sudamérica 

El año 2001, José Marcelo Salas es traspasado a la Juventus en un fichaje millonario.

Tras un buen comienzo como titular, es paulatinamente dejado en la banca para jugar sólo en los segundos tiempos.

Jugando por la Juventus de Turín, Salas termina lesionándose gravemente, lo cual lo obligó a permanecer seis meses alejado de las canchas. Trás aquel fatídico 20 de octubre de 2001, en el partido frente al Bologna, Salas nunca vuelve a retomar su nivel físicamente. Aunque al final ganó varios títulos con la Vecchia Signora.

La lesión del «Matador» nunca logró ser curada completamente, y terminó volviendo al club argentino River Plate, para poder iniciar su recuperación. Esto no le impidió ganar el Torneo Clausura en 2004 y consagrarse subcampeón de la Copa Sudamericana tras caer ante Cienciano de Perú. En el año 2005, regresó a Universidad de Chile. En el Torneo de Clausura 2005, Salas junto a Universidad de Chile logró ser finalista del campeonato, en el que marcó 7 anotaciones. En el Torneo de Apertura 2006 marcó 13 goles, donde su equipo perdió la final frente a Colo-Colo en una dramática definición por penales.

En el Torneo Clausura de 2006, su equipo es eliminado en los playoffs. En medio de una fuerte disputa pública con el síndico de quiebra que está a cargo del club, Salas decide finalmente dejar el conjunto azul, para pasar a organizar eventos deportivos, dedicar mayor tiempo a sus hijas y a sus estudios universitarios.

Marcelo Salas ostenta el honor de haber logrado titularse campeón de las respectivas ligas nacionales con cada una de las camisetas de clubes profesionales que ha vestido, tanto en Chile como en Argentina e Italia. 


Selección Nacional 

Su paso por la Selección también ha estado plagado de éxitos. Junto a Iván Zamorano, lograron llevar al Seleccionado nacional a la Copa del Mundo de 1998, en la cual marcó 4 goles (2 contra Italia, uno contra Austria y otro contra Brasil), siendo el goleador de su equipo. Cabe señalar que en una gira preparatoria para el Mundial de Futbol Francia 1998, Chile juega un partido amistoso ante Inglaterra en el mitico estadio de Wembley ante cerca de 65.000 personas en un recordadisimo partido que gano Chile por 2-0 con 2 goles del Matador. Uno que realmente fue un golazo con un control, giro y definicion sin dejar que la pelota tocara el suelo despues de un centro de Jose Luis Sierra. Mientras que el otro un penal que el mismo creo tras amague a Sol Campbell. Tras una larga ausencia en la Selección, y de varios partidos sin anotar, anotó el tercer gol de la victoria de Chile ante Bolivia, el 4 de junio del 2005. Con este gol acabó con su sequía goleadora con la Selección, que se remontaba desde 2001, y se convirtió en el máximo goleador histórico de la Selección con 35 goles, superando a Iván Zamorano y Carlos Caszely. Además jugó la Copa América de 1995 y 1999, en ésta última logrando el cuarto puesto.

Con la banda sangre en el corazón 

Su debut en las canchas trasandinas, fue el 15 de septiembre de 1996, jugando unos minutos frente a Huracán, luego vino el gran clásico del fútbol argentino frente a Boca Juniors, un partido especial para Salas, por su frustrado paso al club xeneise, y además partía como titular en River, y no defraudó, anotó un golazo ganándose el inmediato aprecio de la hinchada.

El técnico de River Plate en esa epoca era Ramón Díaz, y en el equipo destacan jugadores de la talla de Enzo Francescoli, Ariel Ortega, Marcelo Gallardo y Juan Pablo Sorín. Salas anota 7 goles en 14 partidos jugados en el apertura 1996, una muy buena marca para un jugador reserva y en su primera temporada. Los goles más importantes fueron en el partido definitorio contra Velez Sarfield y Salas convirtió los 2 goles, que le dieron el título a River y al chileno la estampa de ídolo en Argentina.

La prensa de ese país le dedica portadas y artículos que no dejan de elogiarlo, pese a jugar como suplente su promedio de goles fue superior al de sus compañeros, y la hinchada riverplatense le demuestra su cariño mediante el canto a todo pulmón de "Chilenoo... Chilenoo".

El, agradece con goles y con su clásica celebración, se hinca, apoyando su rodilla derecha en el césped y con el índice apuntando al cielo.

El año 1997 fue simplemente extraordinario para Marcelo Salas. Se consagra como ídolo en River Plate siendo fundamental en el equipo que consigue el Apertura 97, el Clausura 97 y la Supercopa sudamericana de 1997. Además, con la Selección Chilena logra clasificar al Mundial de Francia 1998. Este mismo año fue elegido el Mejor Jugador Extranjero en Argentina y recibió el premio Balón de Oro del Mejor Jugador de América. 


Juventus, la lesión y el regreso a Sudamérica 

El año 2001, José Marcelo Salas es traspasado a la Juventus en un fichaje millonario.

Tras un buen comienzo como titular, es paulatinamente dejado en la banca para jugar sólo en los segundos tiempos.

Jugando por la Juventus de Turín, Salas termina lesionándose gravemente, lo cual lo obligó a permanecer seis meses alejado de las canchas. Trás aquel fatídico 20 de octubre de 2001, en el partido frente al Bologna, Salas nunca vuelve a retomar su nivel físicamente. Aunque al final ganó varios títulos con la Vecchia Signora.

La lesión del «Matador» nunca logró ser curada completamente, y terminó volviendo al club argentino River Plate, para poder iniciar su recuperación. Esto no le impidió ganar el Torneo Clausura en 2004 y consagrarse subcampeón de la Copa Sudamericana tras caer ante Cienciano de Perú. En el año 2005, regresó a Universidad de Chile. En el Torneo de Clausura 2005, Salas junto a Universidad de Chile logró ser finalista del campeonato, en el que marcó 7 anotaciones. En el Torneo de Apertura 2006 marcó 13 goles, donde su equipo perdió la final frente a Colo-Colo en una dramática definición por penales.

En el Torneo Clausura de 2006, su equipo es eliminado en los playoffs. En medio de una fuerte disputa pública con el síndico de quiebra que está a cargo del club, Salas decide finalmente dejar el conjunto azul, para pasar a organizar eventos deportivos, dedicar mayor tiempo a sus hijas y a sus estudios universitarios.

Marcelo Salas ostenta el honor de haber logrado titularse campeón de las respectivas ligas nacionales con cada una de las camisetas de clubes profesionales que ha vestido, tanto en Chile como en Argentina e Italia. 


Selección Nacional 

Su paso por la Selección también ha estado plagado de éxitos. Junto a Iván Zamorano, lograron llevar al Seleccionado nacional a la Copa del Mundo de 1998, en la cual marcó 4 goles (2 contra Italia, uno contra Austria y otro contra Brasil), siendo el goleador de su equipo. Cabe señalar que en una gira preparatoria para el Mundial de Futbol Francia 1998, Chile juega un partido amistoso ante Inglaterra en el mitico estadio de Wembley ante cerca de 65.000 personas en un recordadisimo partido que gano Chile por 2-0 con 2 goles del Matador. Uno que realmente fue un golazo con un control, giro y definicion sin dejar que la pelota tocara el suelo despues de un centro de Jose Luis Sierra. Mientras que el otro un penal que el mismo creo tras amague a Sol Campbell. Tras una larga ausencia en la Selección, y de varios partidos sin anotar, anotó el tercer gol de la victoria de Chile ante Bolivia, el 4 de junio del 2005. Con este gol acabó con su sequía goleadora con la Selección, que se remontaba desde 2001, y se convirtió en el máximo goleador histórico de la Selección con 35 goles, superando a Iván Zamorano y Carlos Caszely. Además jugó la Copa América de 1995 y 1999, en ésta última logrando el cuarto puesto

viernes, 10 de agosto de 2012

CRÁCK´S :El Talento de un CHAMACO : Francisco "Chamaco" Valdés Muñoz

Sinonimo de buen fútbol, de personalidad fuerte líder de colo - colo y la selección chilena. un virtuoso con el balón en los pies, de esos que no quedan. De esos que solo se cuentan en las historias cuando te vas a dormir.
De esos era Chamaco un genio con un balón en los pies. desde niño allá en la población juan antonio ríos demostraba su talento. llego a las inferiores de colo - colo y de hay dio el salto al profesionalismo. en ese partido se lleno de gloria frente a cerro porteño. era un amistoso veraniego y el entraba de puntero izquierdo y convirtió un gol lleno de magia y con esto grabar su nombre a fuego en la historia del popular y su hinchada.
Lucho siempre por lo justo, velo siempre por sus compañeros y así lo dice la historia cuando salvo de la dictadura a su compañero de equipo Hugo Lepe y primer presidente del sindicato de futbolistas profesionales de chile.
Fue quien también convirtió el histórico gol en un arco vacío en el estadio nacional.
Es ese futbolista en el que todos los niños se veían reflejados, todos querían ser Chamaco, y eso lo dice todo. Goleador Historico en tornos oficiales con 215 y que lo convierte en estandarte y modelo a seguir. esos goles aún hacen homenaje de su talento en el fútbol chileno.
Con una técnica exquisita como jugador se destaca su pegada con ambas piernas, su magia al momento de habilitar, no le importaba si era pelota parada o si iba en el aire el se las arreglaba de tal manera de que ese balón llegara al pie de un compañero estuviera al lado o 40 metros más allá.
Quienes lo vierón jugar dicen que no tuvo rival alguno y se codeo con los mejores del orbe en 1966 y 1974.
Quedo su nombre estampado su nombre en el olimpo del fútbol y se recordara por siempre a ese genio que vino de entre gente humilde a demostrar que el fútbol es inteligencia y técnica.
Desde este humilde lugar envío un afectuoso abrazo al viento esperando lo recibas querido Chamaco y agradezco tu legado lleno de fuerza y magia; lleno de emoción y talento; lleno de esa simpleza y sonrisa de muchacho que jamas borro de su cara.

Francisco "Chamaco" Valdés, simplemente gracias por ser ese ídolo que aún eres

Esta es su Historia :

Francisco "Chamaco" Valdés Muñoz (SantiagoChile19 de marzo de 1943 - † Santiago, Chile, 10 de agosto de 2009 ) fue un futbolista que jugaba en la posición de centrocampista. Es considerado uno de los jugadores más importantes en la historia del fútbol chileno, y uno de los grandes ídolos del club Colo-Colo. Hasta la actualidad es el máximo goleador en la historia de la liga chilena con 215 goles oficiales.
Destacado por su dominio con ambas piernas del balón, precisos pases en profundidad y certeros tiros libres y penales, fue el centrocampista ofensivo de la Selección Chilena en los mundiales Inglaterra 1966 y Alemania 1974.

El 26 de enero de 1961, Colo-Colo se enfrentaba frente a Cerro Porteño, el partido es estrecho. Por los parlantes se anuncia un cambio. Sale Bernardo Bello y entra Francisco Valdés. Una figura desconocida y menuda entra a la cancha. Un minuto después, el desconocido de gana la primera ovación de las muchas que tendrá en su vida deportiva: su primer contacto con la pelota es para anotar el gol que la da la victoria al cuadro albo. Así comienza la historia de “Chamaco”, apodado por su padre fanático de las películas mexicanas, inicia una carrera que lo convertirá en una de las figuras más representativas de Colo-Colo.
Valdés es el máximo artillero del fútbol chileno, y de Colo-Colo por torneos oficiales con 181 goles (179 en 353 partidos por el campeonato nacional más 1 gol por la Liguilla Pre-Libertadores y un gol por la definición del quinto lugar del Torneo Metropolitano 1968) y el máximo goleador por Copa Libertadores con 20 tantos en 44 cotejos. Toda una hazaña para un medio campista, que además era un excelente habilitador.
Fue el cerebro y junto a Carlos Caszely las máximas figuras del afamado Colo-Colo de 1973. Con Colo-Colo fue campeón chileno en 1963 y 1972. Además fue subcampeón de la Copa Libertadores de América en 1973. Jugador importante en el ascenso de Deportes Arica a la primera división del fútbol chileno en 1981.
Por la Selección Chilena jugó 50 partidos, anotando 9 goles. Fue el centrocampista ofensivo de Chile en los mundiales Inglaterra 66 y Alemania 74. El mismo año en que fue subcampeón de la Copa Libertadores con Colo-Colo, fue capitán de la selección que se clasificó en el mundial deAlemania 74.
A la hora de destacar la humanidad de Valdés, se recuerda lo acontecido en 1973, en plena dictadura militar, cuando acudió en ayuda de los futbolistas Hugo Lepe y Mario Moreno, quienes estuvieron presos tras el golpe militar. "Fue solidario con sus compañeros en esos momentos tan difíciles" destacó la presidenta Michelle Bachelet el día de sus funerales.
Después de su retiro, dedicó su vida a enseñar a los niños. Sus últimos años trabajó en el programa de gobierno de Michelle Bachelet llamado "Escuelas preventivas de fútbol", dedicado a niños de escasos recursos. Fue en Recoleta donde obtuvo su último triunfo deportivo, junto Luis Lee-Chong, compañero en deportes Arica, obtuvieron el primer lugar en el campeonato "Danone", sacando pasajes a Sudáfrica para representar a Chile en el campeonato mundial infantil.
Valdés fue encontrado sin vida en su cama, por su pareja Maritza, el 10 de agosto de 2009, producto de un infarto agudo al miocardio, a la edad de 66 años. Estaba muy afectado luego que la semana anterior muriera su hermano Mario, a quien recién había enterrado el domingo antes de su fallecimiento.


De puntero izquierdo evolucionó hasta convertirse en mediocampista inolvidable. Quizás junto a Enrique "Cua Cuá" Hormazábal, su maestro, sea el jugador más dotado técnicamente de nuestra historia.

La memoria colectiva registra a Francisco Valdés como prototipo del mediocampista talentoso, de amplia visión periférica, capaz de hacer jugar a sus compañeros y demostrar con un toque que el fútbol es ante todo inteligencia y técnica. Le pegaba al balón sin dificultades con las dos piernas, era capaz de poner un pase de 30 ó 40 metros con precisión superlativa y definía con singular categoría.

Como muchos talentosos, fue díscolo en sus comienzos. No logró alcanzar el reconocimiento internacional que su jerarquía ameritaba, quizás porque no sopesó las potencialidades. Deslumbró de entrada, cuando en un cuadrangular veraniego de 1961 debutaba por Colo Colo, el equipo que lo marcaría a lo largo de su carrera. Fue empate 1 a 1 frente a Cerro Porteño y el menudito puntero izquierdo que hacía su estreno ante los guaraníes marcaba la igualdad. Fue su bautismo de fuego.

César Luis Menotti suele decir que el talento sensibiliza y emociona. Poderosa razón para explicar el cariño que de inmediato recibió de la gente. Fue ídolo de entrada, aunque también muchos lo resistieron. Colo Colo fue campeón en 1963, anotando la histórica cifra de 103 goles, y Valdés se erigió como una de las figuras en un ataque que lucía a "Cua Cuá" Hormazábal, Mario Ortiz, Mario Moreno, Luis Hernán Alvarez y Bernardo Bello, además del argentino Walter Jiménez que cedió su puesto a un recuperado Hormazábal.

Vendrían tragos amargos, como su participación en la Copa del Mundo de Inglaterra '66, donde no jugó. "Estábamos divididos entre los jugadores de la U, de Católica y de Colo Colo", recordaba años más tarde. Sería su primer choque con el seleccionador Luis Alamos, quien prefirió a los jugadores del Ballet Azul en los duelos de Sunderland y Middlesbrough. Al regreso, Chamaco cuestionó duramente al Zorro y el quiebre pareció definitivo. Fue malo el final de la década para Valdés. Muchos pensaban que era uno más de los cientos de jugadores que surgen llenos de condiciones, pero que nunca se consolidan.

Los dirigentes lo consideraban un líder negativo. Como capitán luchaba por los derechos de sus compañeros en Colo Colo. Héctor Gálvez y Naim Rostión, máximos dirigentes de la época, lo enviaron a Unión Española en 1970. Un duro golpe que lo llevó después a Antofagasta Portuario. Chamaco mantenía sus virtudes, pero estaba lejos del gran escenario. Hasta que a comienzos de 1972 llegó el reencuentro con Alamos. "Te necesito como caudillo, voy a formar un equipo para ganar el campeonato, la Copa Libertadores, que será la base de la selección para llegar al Mundial, pero tienes que entrenar y bajar de peso", le dijo el Zorro.

El tiempo curaba las heridas de Inglaterra. Se gestaba el gran cuadro albo que ganaría el torneo del '72 y uniría a Chile un año más tarde, cuando en medio de la convulsión política reinante, el país futbolístico sería uno tras el sueño de la Copa Libertadores ante Independiente.

"No se pudo, porque nos robaron, esa es la pura verdad", comentó después. Una sensación generalizada que sólo fue paliada cuando Colo Colo alcanzó la Copa Libertadores en 1991.

Una pequeña revancha vivió meses más tarde, cuando capitaneó a la selección nacional que clasificó a la Copa del Mundo de Alemania '74. Con la base del plantel albo, Chile eliminó a Perú y Valdés fue protagonista. La confianza de sus compañeros queda graficada en el poder que le otorgaban para negociar los premios. "Siempre me tiraba con el tejo pasado, incluso pidiendo más de lo que acordábamos con los muchachos y los dirigentes de esa selección", evocaba.

En la cita germana no jugó como se esperaba. Sus diferencias con Carlos Reinoso fueron tan severas que afectaron el rendimiento global. Valdés no quiso hacer problemas a un enfermo Alamos y aceptó con resignación ser sustituido en los tres partidos. 2Los cabros me pedían que hiciera valer mi condición de capitán, querían que yo jugara, pero no quise provocar un conflicto. Con el tiempo creo que fue un error", reconoció a revista Don Balón en una entrevista.

Tipo simple Chamaco, de sonrisa fácil y trato campechano, hoy transmite sus enseñanzas a los niños en su escuela de fútbol. Ni siquiera sus dolencias cardíacas lograron alejarlo de la pasión de toda su vida. La misma que empezó a crecer en la polvorienta cancha de la población Juan Antonio Ríos, donde hace más de cincuenta años un flaquito pequeñito demostraba que con la pelota ya sabía un montón".