viernes, 14 de septiembre de 2012

Columna de El Titiritero : Selección Chilena : Un Café Amargo



Mala circunstancia para debutar con una columna, mal el tema elegido, mal el partido de Chile contra Colombia, o sea todo mal.

Pero los amantes del futbol tenemos esa virtud, o estupidez si usted quiere, de sobreponernos a las caídas no importando lo duro de ellas; el mandamiento principal del futbolero indica que se debe ser  hincha en las buenas y en las malas. Dicho esto es casi imposible abstraerse al ambiente negativo que ha generado una actuación desastrosa de la selección en su casa, ante su gente y frente a un rival que se comió 10 goles en los últimos 3 partidos que disputó frente a chile.
Entonces que ocurrió el Martes recién pasado? Por qué Colombia nos bailó al ritmo de la mejor cumbia en el Monumental? Como pasamos de ser lideres de las “Clasificatorias” a ser quintos en las “Eliminatorias” rumbo a Brasil 2014? En donde quedó extraviado ese equipo agresivo, de buen toque y una dinámica capaz de arrollar al rival mas poderoso?

Vamos por parte; Colombia realizó el partido opuesto al que nuestro DT (un tipo bonachón al  extremo tal  de dar las tardes libres a sus muchachos, porque “los vió bien”) no se refugió, tomó rápidamente el control del mediocampo y asfixió a una roja nerviosa. De mitad para arriba los morochos son letales, tienen a un tipo que está  encendido como Falcao, que en los últimos partidos lleva mas goles de los que yo hice en mi pobrísima carrera como futbolista amateur, a Teo Gutiérrez, quien de no ser por su extraña afición a las armas y el escandalo ya estaría jugando en cualquier club europeo, un tipo  como Macnelly, desechado por Colo-Colo y luego reemplazado por el “Mágico González” increíble!!! Y a un James Rodríguez en un nivel superlativo manejando el juego a su antojo.

Y Chile: bien gracias! Una defensa improvisada con Vidal fuera del puesto que lo tiene consagrado como uno de los mejores del Calcio, Jarita en lo suyo (casi nada) y Marcos González mirando como se divertían los cafeteros. Isla fuera de ritmo, Mena no fue ni la sombra de lo que juega en la U y una dupla de volantes centrales, Medel y Díaz, que jamás se apodero del medio. Caso aparte el pitbull cayendo por enésima vez en su mal entendida guapeza y matando las pocas chances que teníamos de ganar. Después de su expulsión, Díaz solo corrió para todas partes como perrito nuevo sin aportar nada al equipo. El Mati fue junto a Bravo, lo mejor de lo nuestro, aportando ambos sacrificio y amor propio en un equipo sin alma. Me pregunto todavía si el Sánchez que ví era el del Barca o el doble que salió en todos los diarios, un verdadero triatleta; correr, bicicleta y nada.
Lo de Chupete es tremendo. Un tipo que hace 2 años fue goleador de las eliminatorias, temible delantero para nuestros rivales, hoy juega a 40 metros del arco y sin un solo pase que lo deje a mano a mano y en una soledad increíble.

Que hacemos entonces? La respuesta solo la tiene el Bichi, queda un mes para enfrentar al difícil Ecuador en la altura de Quito y luego recibir a la Argentina de Messi, Higuaín y compañía.

Solo puedo indicar desde mi humilde tribuna que es imposible a los muchachos se les olvide
jugar al futbol de un partido a otro, es imposible que a Borghi se le olvide dirigir si no hace mucho fue multi -campeón en Chile y llevó a Argentinos Juniors a ganar el torneo Argentino (equivalente a ser campeón en Chile con el Chaguito Morning) por lo tanto debe dejar de lado las criticas, enfocarse en levantar a sus hombres y seguir peleando una guerra que no esta para nada perdida, revisando una y mil veces los errores cometidos y planificando los próximos 6 puntos que serán vitales en la carrera rumbo a Brasil.
Como buen hincha, estoy dolido, enojado y triste, pero aún creo en mi roja, no importa las veces que caiga, siempre estaremos ahí como lo dicta el primer mandamiento del hincha futbolero

Amén!

El titiritero

Casi promesa del fútbol

ex-talento creativo

actual defensa hachero

En Twitter : @DonTitiritero



CRÁCK´S : El Último 10 Clásico : Juan Román Riquelme


Un Ídolo para su club boca juniors, donde lleno de magia cada cancha que piso y que ilusionaba en cada toque que daba al balón. 
Un señor del fútbol, que priorizo siempre el buen juego. ese es nuestro Cráck de hoy y así lo describen estas líneas:

Juan Román Riquelme la vida no alcanza, 
Para ver tú arte que no acaba nunca, 
Para verte serio sin saber que pasa, 
Cuando la derrota estar con vos busca. 

Juan Román Riquelme dios de los bosteros, 
Dios de un solo templo, de una sola biblia, 
Dios de los xeneises, dios de todo el pueblo, 
El futbol sin vos, futbol no sería. 

Juan Román Riquelme, esta es su Historia


En 1978, un día antes de la primera conquista argentina en una Copa del Mundo, nació en Buenos Aires Juan Román Riquelme. En efecto, el 24 de junio de aquel año, el hogar de la humilde familia Riquelmerecibió a uno de los once hermanos.
El romance entre Román y la pelota no tardó en concretarse. Desde muy pequeño, Román se destacó en los potreros de su San Fernando natal. Primero defendió los colores de clubes barriales, entre ellos La Carpita. El gran nivel de Román en aquellos campeonatos barriales llegó a oídos de varios buscadores de talentos, quienes debieron luchar para convencer a Román de fichar por algún club grande. El enviado de Argentinos Juniors convenció a Román y se lo llevó a La Paternal.
Los primeros tiempos en la disciplina de Argentinos Juniors fueron duros, Román tuvo problemas para conseguir la titularidad y ocupó en principio, el puesto de mediocampista central. Desde allí, desplegó todo su talento, pero esa función obligó a Riquelme a realizar un gran desgaste físico, lo que le costó perder la titularidad.
Mientras tanto, Román forjó su amor por Boca Juniors cada domingo desde las tribunas de “La Bombonera”; el padre de Emmanuel Ruiz, otro crack “made in Argentinos”, llevó a ambos amigos con rigurosa disciplina a ver al primer equipo “azul y oro”.
El gran juego de Román lo hizo famoso en el ambiente de las divisiones inferiores. En 1996, Carlos Bilardo aconsejó a Mauricio Macri la compra de varios valores de Argentinos Juniors. En una operación sin precedentes en el fútbol argentino, Boca adquirió al club de La Paternal las fichas de grandes promesas: Fabricio Coloccini (hoy flamante figura del Atlético Madrid), Pablo Islas, César La Paglia, Carlos Marinelli (titular en el Middlesbrough inglés), Emmanuel Ruiz y Juan Román Riquelme.
Obviamente, Riquelme causó sensación en Boca desde el principio. La pobre campaña del conjunto “xeneize” obligó al entrenador Bilardo a apurar el debut del talentoso mediocampista del barrio San Jorge.
Román debutó el 11 de noviembre de 1996 ante Unión de Santa Fé en “La Bombonera”. Aquella tarde Boca venció 2 a 0 al conjunto “albirrojo” en lo que fue el comienzo del romance entre Riquelme y la parroquia boquense. De allí y hasta el final del torneo Apertura, Riquelme fue titular y su nivel fue en ascenso.
Su primer gol en primera no tardó en llegar. El 24 de noviembre Riquelmeconvirtió el sexto gol en la goleada de Boca sobre Huracán por 6 a 0; Román volvió a marcar en la derrota de Boca 4 a 2 frente a Rosario Central.
En febrero de 1997, Román formó una gran dupla creativa con Pablo Aimar en la selección sub 20 que ganó en forma brillante el Campeonato Sudamericano de Chile, en aquel torneo convirtió 3 goles.
Héctor “Bambino” Veira asumió la dirección técnica de Boca Juniors a principios de 1997. El juego del conjunto en general nunca fue bueno en el torneo Clausura, pero Riquelme consiguió mantener su nivel a lo largo de los 14 partidos que disputó y en los que marcó 2 goles.
José Pekerman construyó un verdadero “Dream Team” para el Campeonato Mundial de Malasia: Riquelme, Aimar, Samuel, Placente, Scaloni, Cambiasso, Romeo y Franco entre otros brillaron en la espectacular conquista argentina. Riquelme convirtió 4 goles en el campeonato.
El talento de Riquelme hizo que equipos de Europa como el Betis de Sevilla y el Parma se interesaran en su concurso. Román desestimó ambas ofertas y prefirió continuar jugando en el club de sus amores.
Veira acarició la gloria con Boca en el Apertura ’97, pero al equipo le faltó gas en la parte final y el campeonato fue a las vitrinas de River Plate. Pero en la vida futbolística de Román hubo un hecho testimonial: el 25 de octubre se enfrentaron River y Boca en el “Monumental”. Ese encuentro fue el último que disputó oficialmente Diego Armando Maradona; tras una derrota parcial por 1 a 0, Veira dispuso el cambio de Riquelme por Diego Maradona y Boca pudo dar vuelta el juego y el resultado de la mano de Román. Ese cambio fue el traspaso del trono de Diego a Román. Aquella gloriosa tarde, Román fue considerado unánimemente la figura del cotejo por toda la prensa especializada.
El 16 de noviembre de 1997 Román debutó en la Selección Mayor. Y el debut no pudo ser en otro lugar que “La Bombonera”. Daniel Passarella convocó a Riquelme al último partido de Argentina en las eliminatorias hacia la Copa del Mundo Francia ’98. Riquelme ingresó en el minuto 80 en lugar de Marcelo Gallardo y las tribunas estallaron con una cerrada ovación.
El primer semestre de 1998 fue muy difícil para Boca Juniors. El equipo de Héctor Veira se bajó temprano de la lucha por el título y Riquelme jugó poco en ese torneo. No obstante esto, Riquelme fue nuevamente convocado por José Pekerman para el Torneo Esperanzas de Toulon. Argentina se alzó con el título y Juan Román Riquelme fue considerado el mejor jugador del torneo.
Pero en julio de 1998 llegó a Boca Juniors el entrenador Carlos Bianchi. Este extraordinario director técnico respaldó a Riquelme desde el primer día; lo hizo sentir importante y le dio un rol protagónico. Y Román no defraudó a Bianchi: el condujo magistralmente al Boca campeón invicto del Apertura ’98. Riquelme tuvo asistencia perfecta en el torneo y marcó 3 goles. Riquelme conformó un letal trío ofensivo junto a los delanteros Guillermo Barros Schelotto y Martín Palermo.
El gran paso de Boca continuó con la obtención del Clausura ’99.Riquelme continuó deleitando a todo el mundo del fútbol con su excepcional juego repleto de belleza y efectividad.
En julio de 1999 Riquelme fue convocado por el seleccionador Marcelo Bielsa; Román formó parte del plantel que disputó la Copa América Paraguay ’99. El nivel que mostró el talentoso mediocampista fue bueno, pero sin llegar a los niveles de Boca Juniors.
En agosto de 1999, Riquelme y el Barcelona se vieron las caras por primera vez. Una verdadera exhibición de gambetas, pisadas y caños de un inspirado Román enloquecieron a los defensores “blaugranas” durante un amistoso disputado en Málaga en el que Boca venció por 3 a 2.
En el año 2000 llegó el momento de afrontar el gran desafío: disputar la Copa Libertadores de América. Y Román fue gran artífice de la tercera conquista continental de Boca Juniors. En la memoria de la afición boquense perduran grandes momentos de Riquelme como el golazo de tiro libre a River en el Monumental, el penal convertido y el caño de taco al defensor Yepes en la revancha ante el mismo rival y el fútbol desplegado durante las finales frente al Palmeiras.
Con América a sus pies, Boca fue por el Mundo... El equipo de Carlos Bianchi encaró la segunda parte del año 2000 con el objetivo prioritario de la Copa Intercontinental y con la intención de pelear hasta el final el Torneo Apertura y la Copa Mercosur. Y Boca estuvo cerca del póker... Boca ganó el campeonato local, llegó a octavos de final en la Mercosur y tocó el cielo futbolístico a fines de noviembre en Tokio cuando batió 2 a 1 al Real Madrid. Aquella noche Riquelme deslumbró al mundo con una actuación sensacional. Román se convirtió en una pesadilla para toda la defensa madridista, en especial para Geremy y Makelele. Tan espectacular labor de Román hizo que el Barcelona se convenciera de su fichaje. El conjunto “culé” acordó el traspaso con Boca Juniors en una suma superior a los 20 millones de dólares, operación que luego quedó frustrada.
El 2001 trajo como gran desafío revalidar todos los títulos obtenidos durante el 2000. Boca Juniors no pudo repetir el juego brillante de la temporada anterior pero el oficio del equipo le alcanzó para retener la Copa Libertadores. En el torneo local, lo más destacado fue la paliza 3 a 0 a River en “La Bombonera”. Aquella noche Román mostró por primera vez su festejo a lo “Topo Gigio” (en honor a su hijita Florencia, según dijo).
El equipo debió recorrer un durísimo camino hacia la Copa. En el infierno del Estadio Metropolitano de Barranquilla Boca sacó a relucir su temple y venció al local por 3 a 2; en la revancha igualaron 1 a 1.
En cuartos de final, el rival fue el Vasco Da Gama, equipo que hasta el momento de enfrentar a Boca había ganado todos sus partidos. El campeón de América venció al Vasco 1 a 0 en Río de Janeiro y bailó a los brasileños 3 a 0 en una “Bombonera” repleta.
En las semifinales, Boca enfrentó a un Palmeiras dirigido por Luiz Felipe Scolari sediento de revancha. Como en las finales de la Copa del 2000, fue igualdad 2 a 2 en la ida en Buenos Aires (el segundo gol de Boca fue una espectacular apilada de Román para servirle el gol a Barijho) y se repitió el marcador en el Parque Antártica, el hogar del “verdao”. Pero en la revancha Riquelme jugó uno de los mejores partidos de su vida. El fue el responsable de la clasificación de Boca para la final. Riquelme enloqueció a los defensores de Palmeiras con su repertorio más bello y efectivo, el segundo gol de Boca fue una verdadera obra de arte de Román.
Boca y el Cruz Azul mexicano dirimieron la monarca americano del 2001. Boca sorprendió a los “aztecas” en la primera final cuando venció 1 a 0 con gol de Marcelo Delgado. Todos dieron entonces por descontado el tetra campeonato de América para los “xeneizes”, pero el Cruz Azul le devolvió la gentileza a los dirigidos por Carlos Bianchi y fue necesaria la definición con disparos desde el punto penal para consagrar al campeón. Román tranquilizó a toda la parroquia “azul y oro” al convertir la primera ejecución; las manos de Oscar Córdoba hicieron el resto y Boca retuvo el cetro máximo a nivel clubes en Sudamérica.
El Bayern Munich asomó entonces como el gran desafío para los hombres de Bianchi. Lamentablemente, Boca Juniors cayó derrotado por los alemanes 1 a 0 en los últimos minutos del tiempo suplementario. Román no pudo reeditar su hazaña del año anterior. Los alemanes, debidamente notificados del talento de Riquelme, lo marcaron de cerca y no dudaron en utilizar el juego brusco para detenerlo.
La prensa argentina lo distinguió con el premio “Olimpia” de Plata 2001.
Envuelto en una serie de interminables disputas con la dirigencia boquense, Riquelme supo que estos primeros meses del 2002 serían los últimos con la camiseta “azul y oro”. Riquelme se impuso como gran meta para este año formar parte del plantel argentino del Mundial de Corea y Japón y conquistar por tercera vez consecutiva la Copa Libertadores con Boca Juniors. Lamentablemente, Román no consiguió ninguna de las dos cosas y sufrió además un penoso incidente familiar, lo cual motivó su decisión de abandonar la disciplina de Boca Juniors. Las controversias en las que se vio envuelto le quitaron a Riquelme esa alegría necesaria para desarrollar cualquier actividad.
Tras su discreto paso por el Barcelona, ha logrado demostrar al mundo entero sus cualidades en el Villarreal. El equipo del chileno Pellegrini, semifinalista de la Champions League 2005-2006, ha formado un esquema de juego que depende de Riquelme. Pero tras esa exitosa temporada, y diversas diferencias con el entrenador chileno, Riquelme vuelve a Boca Juniors para ganar su tercera Copa Libertadores.
El día 13 de septiembre del año 2006, Riquelme anunció su renuncia a la selección nacional de fútbol argentina, debido a la complicada situación de salud de su madre. Pero decide volver en 2007, y Alfio Basile le da la capitanía, a pesar de no jugar en su club. Se consagró campeón en los Juegos Olímpicos de 2008. Tambien fue figura en la mayoría de los partidos de las Eliminatorias 2010, y además el goleador del equipo, pero por culpa de Maradona, nuevamente el torero debe renunciar al seleccionado, y de ésta manera se pierde el Mundial de Sudáfrica 2010. 

En la ida de la final de la copa libertadores 2012, Boca empató con el Corinthians 1 a 1 con gol de Facundo Roncaglia y Romarinho. En el cotejo vuelta, Boca perdió 2-0 con goles de Emerson, perdiendo su cuarta final de Libertadores.
Luego del partido, Riquelme anunció que no continuará en el club. Siendo uno de los máximos ídolos de la historia del club, su salida definitiva marca el fin de un ciclo para Boca. De todas formas Juan Carlos Crespi, vicepresidente, aclaró que seguramente Juan Román Riquelme volvería a Boca.